sábado, 4 de enero de 2014

LIBROS DE RECUERDO





LAS CONDICIONES DEL PÁJARO. GINÉS ANIORTE
(Editorial Renacimiento. Sevilla 2.012)


Si Paul Celan buscó durante toda su obra lírica un interlocutor que era un Tú poético, Ginés Aniorte (Murcia, 1960), en su nuevo libro: Las condiciones del pájaro, busca esa interlocución con un pájaro, estableciendo luego un monólogo en el que el poeta entona un bellísimo canto, combinando el más intenso lirismo con el compromiso y la fidelidad de su existir cotidiano, y que conlleva a su vez otros aspectos temáticos como el amor, la naturaleza, el paso del tiempo, la amistad, la muerte, lo erótico, la pasión, siempre trasuntos que han preocupado a nuestro poeta, al sensible y generoso ser humano que lleva dentro.
Sería difícil precisar si este es el mejor libro de Ginés Aniorte, preguntas que siempre se hacen los críticos, lectores y propios autores, poco importa ello, lo que sí está claro es, que es su libro más especial y complejo, lo que hace de este poemario un libro diferente,  muy al margen del resto de la obra del poeta de Sangonera la Verde, aunque mantiene en gran medida la forma clásica de elaborar sus poemas, es decir, la arquitectura de sus versos. La gran virtud de este excelente poemario es sin duda la belleza de las imágenes que el poeta crea, el simbolismo, y las metáforas que van entroncadas con una tradición moderna y clásica a la vez, una tradición compuesta por figuras que nos acercan al misticismo.
Muchos han sido los poetas que a lo largo de la historia han cantado a los pájaros: Emily Dickinson, J. Keats, Claudio Rodríguez, W. Wordsworth, Juan de la Cruz, y muchos otros, pero en el canto del poeta Ginés Aniorte hay algo que lo diferencia de los demás, y esta diferencia radica en la mezcla de familiaridad con la belleza y claridad con la sencillez del canto, que puede atenuar o agigantar, el dolor o la felicidad del ser humano en su deambular cotidiano.
Las condiciones del pájaro es un poemario muy unitario,  en el que el poeta mantiene siempre un tono muy elevado en su canto, con un gran caudal de voz, no hay altibajos en su poemas, el ritmo y la música de los versos se mantienen en todo momento, y la medida de los versos es sublime, lo que hace de este poemario un gran conjunto, que el poeta ha sabido muy bien dividir en cinco apartados que vienen de una cita maravillosa de Juan de la Cruz. En este poemario el poeta ha eludido muy bien el apunte biográfico, no en vano ni el propio autor quizás sea capaz de aclarar realmente quién es ese pájaro que a veces picotea en un ejercicio lúdico las palabras que expone.
Para terminar, como es costumbre, solo resta felicitar a la Editorial Renacimiento de Sevilla por apostar por nuestro admirado y querido poeta, Gines Aniorte, por este excelente libro de un autor ya clásico en la poesía contemporánea española.

                                          José Cantabella





        

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