martes, 2 de febrero de 2016

ALQUILER DE AMORES S. L.


Estimada Sra. López, como gerente de “Alquiler de Amores S. L.”, le contesto a su solicitud, la cual requería nuestros servicios. Le agradezco encarecidamente que confíe en nosotros en materia tan delicada y personal, es un placer servirle y un gran honor que haya confiado en esta empresa, estoy convencido de que no se arrepentirá. Para darle el mejor servicio le propongo un Plan de trabajo que en este caso debe ser conjunto, pues necesitamos de su colaboración activa para que el resultado profesional sea el más satisfactorio en favor de nuestra estimada cliente, logrando así ese ansiado fin que persigue, en definitiva y para ser claros y concisos: la felicidad que usted como gran persona que es, se merece, y nosotros como empresa deseamos.
Para comenzar el plan de trabajo antes citado, le propongo como primera prioridad que acepte de buen grado a nuestro mejor producto (perdone el lenguaje empresarial), nuestro mejor amante, un tal Juan Alegría, nacido como usted en nuestra ciudad, la bella y olvidada ciudad de Recuerdo, el alquilado en cuestión, un hombre de su misma edad, sencillo, bueno, apuesto, gentil y amable entre otras virtudes, que hemos seleccionado especialmente, siempre pensando en sus distinguidas y especiales características, espero que le guste el nombre y apellido, sobre todo y muy especialmente sus particularidades, las cuales se las daremos todas detalladas en su momento si firmara el contrato. Como especialidad de la casa para iniciar una relación sentimental feliz que espero dure toda la vida, le sugiero un encuentro fortuito con él en un parque, ésta es a pesar de los tiempos modernos en que vivimos, la mejor fórmula que tenemos, aunque clásica y romántica, pero le puedo asegurar que ofrece los mejores resultados, y nunca se pasa de moda. Ese encuentro debería de ser una tarde cualquiera de un otoño como el que tenemos ahora que la ciudad de Recuerdo se vuelve de vidrio, a ser preferible en un jardín, si le parece bien en el Jardín de la Seda, ya que ese encuentro debe de ser muy especial, para ello le recomendamos que cuando tropiece con el señor Alegría, una llamarada de fuego debe de recorrer su delicado cuerpo y ahí, en ese emotivo momento debe de nacer el flechazo del amor, uno de los momentos más bellos e intensos de su vida. A continuación nuestro hombre le invitará entusiasmado a tomar un té con galletitas en el Café del Arco después de dar un paseo por la ciudad, comenzará a conocerlo, las primeras sensaciones arribaran, poco importa Sra. López que la vida que usted ha llevado hasta entonces sea vacía y aburrida, eso déjelo de nuestra parte ya que nuestro personal es especialista precisamente en estos avatares, además han sido entrenados durante años para las mayores aventuras amorosas, despertando los aletargados y desconocidos sentimientos de las personas que se han creído más tediosas, siempre hay algo que merezca la pena contar de una vida.
No hay mejor comienzo de una relación para toda la vida que este arranque, espero que le guste, en nuestra experiencia de más de cincuenta años en el mercado de agencias de amores alquilados tenemos las mejores estadísticas, nunca hasta ahora hemos fallado, para ser exactos sólo una vez, si eso ocurriera nos puede usted devolver el producto sin ningún problema, pero no pensemos en eso, en este caso no va a ocurrir con seguridad.
Después le recomendaría siempre que usted lo apruebe, que el señor Alegría antes de que decline la tarde le acompañe a su casa, esto también sigue siendo muy efectivo, le recuerdo que si su compañero no le pide el teléfono, cree usted la situación para que este episodio surja, es banal ya lo sabemos, pero es muy importante que los dos se den los teléfonos, los personales de momento, no los del trabajo, y si pueden ser los móviles mejor aun, y luego a continuación despídase con un fuerte apretón de manos, nada de besos por supuesto, ni siquiera en la mejilla, pues la primera tarde no es conveniente que brote el deseo de la carne, aunque ya sabe usted, la profesión va por dentro, refiero esto por nuestro empleado por supuesto.
El señor Alegría seguramente dejará pasar unos días, difíciles estos sin duda, una gran prueba, usted estará deseando llegar de la oficina y oír sonar el aparato de su habitación o el móvil, procure no sufrir demasiado, aunque le advierto que estos días son infernales, lo que si le aconsejamos es que no idealice demasiado a su amado, tan solo intente sujetarse a la realidad, en lo que más tangible, ya se sabe que esto es bastante difícil en los días de pasión en los que andan inmersos nuestros clientes, en esa nube de la que además no desearían bajarse jamás. Llegado este punto espere con relativa tranquilidad la primera llamada, deseosa de que el fulgor recorra de nuevo su interior, cuando llegue ese momento procure estar sentada, casi mejor acostada, de esa manera podrá después ensoñar un poco mejor al señor Alegría, no olvide insinuarle llegado ese punto que le gusta con pasión el cine, el teatro o la pintura, cualquier arte principalmente, esto queda muy bien, algo para que su nuevo amor encuentre la ocasión para invitarla, bien ir a ver una película al Coliseum, el mejor cine de la ciudad de Recuerdo, una gran obra de Chejov, al Teatro Romea o la mejor exposición itinerante que pueda encontrar por esos días en el Museo Ramón Gaya. Pasada esa primera salida todo es más fácil Sra. López, pues tendrá que empezar a aprender a controlar la llamarada y gobernar el fuego, bastará que llame a nuestro hombre a su móvil y lo tendrá a su disposición como un cordero las veinticuatro horas del día, se lo aseguramos, nunca le fallará.
A partir de ese momento empezarán a caminar los primeros días de novios, conforme se valla habituando empezará a conocer un tema que normalmente y al principio se suele llamar sutilmente: la costumbre, que en realidad no es nada desagradable, digamos que es incluso simpático al principio, un asunto contra el que deberá siempre luchar para que pasados los primeros meses no acuda a su vida eso que la gente tanto desprecia: la rutina, nada de esto en su caso Sra. López, aquí sí que le exigimos a nuestro hombre aplomo, para que ponga todo su esfuerzo y esto no ocurra, le agradecería a usted algo de colaboración también, nada de hábitos señora, en su relación no debe prevalecer esa palabreja, su relación debe ser como un jardín, al que hay que regarlo a diario, y ya sabe la famosa frase una rosa es una rosa.
Cuando su relación llegue a los tres meses debe de buscarse la primera relación sexual, ya sabemos, y esto es secreto profesional, que usted es virgen, en este sentido no sufra, el señor Alegría es un experto, sabe de qué manera debe ser tratada una dama de casi cuarenta años, aquí nuestro empleado se la juega, y a la mínima quedaría despedido. Este aspecto le insisto que lo deje de nuestra parte, su hombre buscará el preciso momento, el lugar, el modo y las circunstancias para hacer de ese especial momento para la mujer, uno de los acontecimientos en su vida que luego recordará con más agrado, y prevalezca como uno de las bases esenciales de respeto y cariño de su relación. Salvado con especial sutileza este escollo nada fácil, su relación seguirá funcionando felizmente, irá creciendo y asentándose, se conocerán enseguida las familias respectivas, primero encuentros inesperados, luego otros concertados, algunos favores personales a la familia política, algún que otro detalle enternecedor que haga de la pareja unos seres muy queridos a ambos lados. Proponga si es posible de mutuo acuerdo en el momento que usted crea mas conveniente que en el futuro la casa en donde desearían vivir sea la suya, de lo contrario no le garantizamos que el Sr. Alegría ponga el piso, además esto nos correspondería a nosotros por supuesto, y no está en el contrato que usted tiene que firmar la semana que viene, si desea revisar esa cláusula especial le rogaría nos lo comunique con tiempo para llevarla al contrato. Llegados a este punto, lo que si querría avisarle Sra. López es que no se crea que la vida en pareja es de color de rosa, ya sé que el cliente siempre lleva la razón, pero no piense que porque reciba nuestros estupendos servicios no va a tener usted que poner mucho interés de su parte, de eso nada, y se lo digo en confianza y con el mayor de los respetos hacia la clientela, nada de candidez, nada de ingenuidad, sea siempre amable con su pareja, no lo desprecie, ni lo ridiculice a pesar de llevar ya un tiempo de novios, si actúa así nunca le pesará, porque él, y esto se lo garantizo, será siempre con usted un hombre muy respetuoso, trabajador, sentimental, sensible, honrado...
Cuando la relación llega a los dos años nosotros siempre aconsejamos la boda, la experiencia nos avala, sobre todo por lo que decíamos antes de la rutina, y los hábitos, programe con ilusión el acontecimiento, procure que sea por la Iglesia, si usted no es muy religiosa hágalo por lo civil, pero esto siempre en último caso, pues luego esas cosas se pueden echar en cara, y surgir los primeros roces, los primeros encontronazos, nunca deseados y que nosotros detestamos, aunque le puedo garantizar que nuestros profesionales aceptan, y acatan cualquier situación difícil de pareja, incluso los días de preparativos para la boda, que tantos estados nerviosos se padecen, le aseguro que jamás son seres indeseables, nunca le han pegado a una mujer, ni siquiera la han maltratado sicológicamente, el caso contrario sí se ha dado, pero como le dije antes el cliente siempre lleva la razón, pero evitemos hablar demasiado de este asunto que es bastante arduo y embarazoso; suponemos que no se dará al caso en su extraordinaria y feliz relación.
También, le aconsejo que el viaje de bodas lo hagan al Caribe, es lo que los matrimonios clásicos, incluidos los modernos, están llevando a cabo últimamente, un viaje de quince días es lo habitual, cuando vuelvan se instalarán en su piso, como ha quedado suficientemente explicado y aclarado, y a partir de ese momento digamos que empieza la vida matrimonial de felicidad que usted nos ha solicitado en nuestra agencia, y esperemos dure toda la vida. Los primeros días de casada, le llevarán el desayuno a la cama, colaborará el hombre de la casa en todas las funciones domesticas, se empleará a tope en tareas íntimas, hará la compra de la semana, tranquila Sra. López que todo irá perfecto.
Ya sabe y esto es muy importante subrayarlo, nosotros le cubrimos de garantía hasta los dos años de casados, a partir de ese momento es usted muy libre de hacer lo que le venga en gana, aunque le puedo decir con mucho orgullo, en nuestra empresa “Alquiler de amores S. L.” sólo se ha devuelto un producto, aunque no es el caso explicárselo en este momento, lo que si le aconsejo es que como le expliqué antes ponga mucho de su parte, y anímese mujer en su nueva vida, no yaya a ser el demonio, y a alguien le dé por pensar que el problema lo tiene usted, y que luego digan las malas lenguas de la bella y olvidada ciudad de Recuerdo que no vale usted para casada, cosa que no creemos sinceramente. Bueno, ya sabe dónde estamos, pásese cuando desee por nuestras oficinas y firme el contrato de su vida.


 Atentamente





(ESTE RELATO PERTENECE AL LIBRO. Llegarás a Recuerdo).
 

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